Cinco Pasos Sencillos para Tener una Dieta Más Alcalina

Retomemos algunos puntos básicos sobre el pH antes de meternos a cómo mantener una lectura neutral de 7.0 o ligeramente alcalina de 7.4 en la sangre para lograr una óptima salud.

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El término pH literalmente significa potencial de hidrógeno. Es una medida de la concentración de iones de hidrógeno. Cada número de la escala de pH representa una diferencia de 10 veces en su concentración. Tu metabolismo tiene que luchar con ahínco para neutralizar el exceso de acidez.

Las medidas de pH en los alimentos pueden ser engañosas. Solamente porque el vinagre de cítricos o de sidra de manzana muestran un nivel bajo o pH ácido no quiere decir que provoque acidez.

La palabra clave aquí es provocar e indica el resultado metabólico luego de la ingestión. Incluso exprimir un limón o lima en un vaso con agua crea un líquido alcalino.

Revisar tu pH vía la saliva u orina podría resultar en lecturas ligeramente más bajas de acidez que el pH de tu sangre. La orina, en especial de tu primera micción tenderá a ser más baja a medida que tus riñones hayan trabajado en eliminar la acidez.
No hay nada de qué preocuparse si estás obteniendo lecturas mayores de seis para cualquiera de las pruebas. Distintos órganos muestran diferentes lecturas de pH en comparación a las de tu sangre.

La acidosis ocurre cuando la lectura en la sangre acaba por debajo de siete y se queda ahí. Esto usualmente es lo que mata a los pacientes con cáncer, en especial a aquellos que están siendo envenenados con los tratamientos de la quimioterapia o la radiación.

Cinco Maneras Simples de Llevar una Dieta Alcalina

Tu metabolismo está diseñado para hacerse cargo de la mezcla inevitable de acidez y alcalinidad en los alimentos. Pero sobrecargar a tu metabolismo lo agotará. Aquí tienes una lista de alimentos ácidos para que tengas una idea de cuáles son.
([url=http://www.naturalnews.com/Report_acid_alkaline_pH_5.html]http://www.naturalnews.com/Report_acid_alkaline_pH_5.html).

1.- Trata de balancear tu dieta con un radio de 60/40 de alimentos alcalinos y ácidos, luego aumenta este radio a 80/20. Por lo general, las dietas estándares consisten en su mayoría de alimentos.

Grasas falsas, azúcar, jarabe de maíz de alta fructosa, plan blanco de harina refinada y pasteles son en extremo ácidos.

Enfócate mejor en verduras verdes, licuados y refrescos frutales, así como súper alimentos como la clórela. Las frutas de todos los tipos, incluso los cítricos considerados ácidos, todos son alcalinos.

2.- El ejercicio moderado contribuye a que el sistema linfático pueda eliminar los residuos acidificantes. El exceso de ejercicio puede crear ácido láctico, el cual es acidificante. Todo es cuestión de equilibrio.

3.- Hidratación. El agua de manantial es viva y alcalina, pero pocos tienen acceso a ella. Es necesario beber agua tratada con ósmosis inversa para remover los fluoruros. El agua tratada tiende a ser acidificante. Eso se puede remediar con unas gotas de limón o gotas de trazas minerales que se pueden conseguir en cualquier tienda de productos saludables.

4.- Hablando de minerales, los minerales clave involucrados con los procesos metabólicos son el magnesio, potasio, calcio y sodio. Irónicamente, los alimentos derivados de la leche tienen a ser alcalinos. De modo que otras fuentes de calcio deben buscarse.

Podría ser necesario suplementar magnesio, potasio y calcio, al menos hasta que tengas una dieta que promueva más la alcalinidad. Busca el aceite de magnesio (aplicado tópicamente como agua) como la mejor solución para el magnesio.

5.- Oxigénate, duerme mejor y estrésate menos. Usa ejercicios de respiración profunda o suplementes que mejoren la oxigenación. Incrementar el oxígeno a las células mejora su pH. No confundas eso con la oxidación celular. Las células ácidas no pueden metabolizar el oxígeno, así que fermentan la glucosa para sobrevivir y volverse cancerosas.

El estrés y la falta de sueño contribuyen a un nivel bajo de pH o acidez. Las células cancerosas no pueden existir en un ambiente alto en pH y rico en oxígeno. El alto pH y una poderosa oxigenación celular están directamente vinculadas.

Puedes mantener tu balance de pH con estos pasos sencillos mientras ignoras las pídoras mágicas carísimas para mejorar tu pH.

 

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