La torre Pizza, una ilógica construcción inclinada, es una de las más grandes maravillas del mundo; cuantas almas en el mundo desean poner sus pies sobre esta incorrección y cuantos de los que lo logran no soñarían vivir para siempre en ella; ascendiendo o descendiendo para desplazarse sobre un mismo nivel de ella, abandonando la perfección de nuestro claustro cotidiano, donde con los ojos cerrados podemos desplazarnos e ir de un lado a otro.-
En una vieja cinta de cine, vi como un alma consternada y deseosa de moldear el mundo, fue y haciendo uso de las facultades de que gozaba, la empujó y la colocó tan vertical como le fue posible; lo que le sorprendió fue que al hacerlo, la convirtió en un edificio común que perdió el atractivo popular; ¿No es el instinto humano el alcanzar la perfección? o es que el error tiene un atractivo especial.-
Nos pasamos la vida buscando, buscamos nuestro origen, nuestro destino, lo que podemos, lo que debemos y lo que queremos, para definir lo que haremos; en un afán de competencia que ha llegado a ser su naturaleza misma, el ser humano se ha delimitado a sí mismo por normas de convivencia, en un trivial anhelo de comodidad nos medimos a nosotros mismos menospreciando nuestras facultades y raramente nos impulsamos por lo que queremos.-
Nos envilecemos y pretendemos construir represas para frenar el impulso natural del agua, para ver frustrados, que se nos escapa entre los dedos e impetuosa llega al mar; atamos las agujas del reloj, pero jamás podremos detener el tiempo; el salmón asciende por el torrente para morir luego de desovar en la cima, ilógico, quizá dijera cualquiera y pretendería salvarle, evitando que suba, pero es su naturaleza; mientras el salmón sube, el agua que es su hábitat necesario para vivir baja, dos naturalezas diversas, opuestas que conviven y coexisten; ¿No subsisten de este extraño artificio de la naturaleza los osos al alimentarse del salmón que llega a las cumbres?
Hay algo o alguien superior que marca el papel que cada cual va a realizar en la vida, llamémosle Dios, energía, poder o cualquier otro sustantivo; quizá nos llenemos de soberbia y digamos que al desalojar al padre Adán y a la madre Eva del paraíso, se les dotó de libre albedrío para decidir entre el bien y el mal; pero cabe analizar si un mal no trae aparejado como la doble cara de una moneda, un bien oculto.-
La naturaleza, entendiéndola como la mano de Dios, nos ha dotado de cinco sentidos sensoriales y de un sentido ultra sensorial; y así hay cosas que vemos, oímos, olemos, degustamos o palpamos, pero el bien y el mal escapan a esta dimensión sensorial y debemos de poner en función ese sentido ultra sensorial para poder intentar buscarlos; y pretendemos separarlos el uno del otro, pero no es eso parte de la naturaleza, si no la rosa no tuviese espinas, la miel no fuera guardada por aguijones, el acre de la sal no fuera imprescindible en la cocina.-
Propio es hacer esta consideración que acaso parezca improcedente con el tema, pero en esta dinámica de pesos y contrapesos, cabe preguntar ¿Que lo importante? el acto o la intención que ha llevado implícita; José Simón Cañas promovió la libertad de los esclavos, pero lo que nadie hace popular es que con su acción lo que perseguía era arruinar a sus competidores y ahorrarse el tener que proveer sustento, techo y otras prestaciones para la subsistencia de quienes eran de su propiedad; Ernesto Interiano, es conocido como un asaltante, ladrón y asesino, pero todas sus acciones pretendían suprimir el abuso del gobierno y de su mano derecha, la autoridad uniformada para con los desposeídos.- Cada uno de ellos hicieron algo bueno a través de algo malo, pero los historiadores ha colocado a uno en los altares de la patria y al otro en la página de los forajidos históricos.-
Si un débil entra a la propiedad de un fuerte es un usurpador, si un fuerte entra a la propiedad de un débil es un conquistador; al ladrón y al asesino de ayer, el interés de sus descendientes los convierte en héroes; entonces podemos acaso concluir que el poder y la fuerza son características imprescindibles para definir entre lo bueno y lo malo.-
Cada acción nuestra lleva imbíbitas ambas caras de la moneda y debemos pagar un precio por el derecho de materializarla; Eva degustó la manzana del árbol vedado, y le compartió a Adán, con este acto consiguieron el discernimiento, pero perdieron su residencia en el jardín del edén; el que osa cortar una rosa, como el que asalta el panal, disfrutan del olor y el sabor, pero sufren la espina y el aguijón.
Debió acaso la madre Eva abstenerse de tomar el fruto, o valió la pena el precio, debemos osarnos en procura de la rosa o la miel, o privarnos de su deleite por temor al dolor; quizá sea mejor que otro lo realice, para disfrutar nosotros de su esfuerzo; pero el precio siempre hay que pagarlo.-
¿Debemos detenernos en la marcha para pretender discernir sobre el bien o el mal?, no será mejor buscar en cada espina la rosa y en cada aguijón la miel, en lugar de continuar lamentando el edén y quejándonos por la manzana; mantenernos sobre el canto de la moneda avanzando hacia el mañana ignorado, impulsándonos con el remo de la fe.-
Traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de dios// que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella, a ellos evita.-
2 Timoteo 3: 4-5
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