Citando las causas verdaderas han sido determinadas previamente, no existen dudas sobre lo que hay qué hacer. -Confucio
Debemos, estar en buenos términos con todos los vivientes para impedir que los hilos invisibles de causa y efecto nos impidan lograr nuestro cometido.
Quién creyera que la salud se recupera tratando con cariño a todas las criaturas, incluyendo insectos, animales, plantas, aire, ríos y tierra.
Quien protege a la naturaleza con amor adquiere más méritos ante Dios, que quien repite mil oraciones sin sentido. -Zoroastro
Con todo respeto por tus ideas y costumbres, te pedimos disculpas por las fuertes imágenes y crudas frases –pero reales- con las cuales tratarnos de despertar conciencia o crear un interrogante. Analízalas con amplio criterio e inteligencia.
LA VERDAD QUE NUNCA FALLA
Todos los sabios, pensadores, poetas, filósofos y científicos verdaderos, han estado de acuerdo en que si una persona vive en total armonía con la Naturaleza, es imposible que su cuerpo enferme. La enfermedad es desarmonía; esto es, dejar de vibrar al ritmo melodioso y constante de su vida. Los resultados: virus, llagas, dolores, debilidad e impedimentos. Lo grave es que, comúnmente, se atacan esas manifestaciones únicamente, sin tener en cuenta las fuentes escondidas que las originan; de ahí los resultados tan desalentadores.
La gente sabe que la vida es una vibración, pero desconocemos que esa vibración debe estar a tono con el Cosmos y con la Naturaleza de la cual provenimos y somos. La gente cree que la Naturaleza son los árboles, las plantas, las flores, los ríos y todo lo que ve cuando sale al campo. Les falta mucho; toda la selva junta es una pequeña manifestación del Gran Todo que tiene que vibrar al unísono con nosotros.
La Naturaleza es Dios y, por tanto, Dios son los ríos, los animales, los insectos, los virus, las bacterias, los ángeles, el viento, luna, las estrellas y nosotros. Cuando nuestra vibración se separa de la vibración Universal, enfermamos.
La gente, en general, sólo vibra en armonía con sus hijos, familiares y amigos; vibra con las flores que decapitaron de su madre planta para verlas morir de hambre en un florero con agua maloliente, lejos de la raíz que las alimentaba con amor.
Cada es un pensamiento de Dios
La gente vibra con el auto, la TV, la computadora, muebles de la casa y la oficina. Pero a dichas personas poco les importa el resto del Universo. De esta forma dejan de vibrar al unísono con Él.
Más le preocupa a una ama de casa la gripa de su hijo, que 50 mil niños que a diario mueren de hambre en el mundo. Más se preocupa el jardinero por la flor que alguien robó de su jardín, que por los millones de hectáreas que a diario se talan en el mundo, para hacer la carga de periódicos, llenos de bagatelas, que a diario traen a las viviendas, y también para hacer toneladas de las cajas de cartón de los supermercados y almacenes.
Nadie se duele de los árboles gigantescos y centenarios que tuvieron que asesinar para hacer los muebles de la casa, los armarios, pasamanos, pisos y escritorios de oficina. Tampoco a la gente le duele los miles de millones de animales que mueren torturados en los laboratorios, diariamente, sometidos a martirios sin nombre por médicos despiadados que los despedazan vivos, lentamente, para experimentos tontos y para producir vacunas, sueros y antibióticos que envenenan poco a poco la humanidad.
¿Cómo, entonces, se exige salud si estamos acabando con Dios, que es la Naturaleza y, a la vez, somos parte inseparable de ella? Cada cual quiere llevar agua a su molino y dejar seco el pozo del vecino. Todos hacemos parte de un “Todo” y, cuando descuidamos esa otra parte nuestra, que creemos separada totalmente, es cuando tarde o temprano regresa a cobrarnos, en forma de enfermedad, el descuido que tuvimos.
Las enfermedades incurables, cuya causa primigenia es el desconocimiento de las Leyes Naturales, están hoy más que nunca acabando con la humanidad, ante la presencia inoperante de una tecnificación médica, que busca donde no está la causa.
Ni permaneciendo el hombre sentado junto al fuego de su bogar; puede escaparse de los males que él mismo ha causado – Karma
SOLUCIONES EFECTIVAS
Tenemos pues que, si una persona no vibra Al mismo tono con toda la Naturaleza, ninguna ciencia ni medicamento podrá acabar con su dolor. Por lo contrario, si una persona decide hacer un cambio, ninguna enfermedad podrá tocar su cuerpo y, si lo ha hecho, comenzará a desaparecer desde ese mismo momento.
Basta que hagas un propósito sincero para que la energía universal invada tu cuerpo. La Naturaleza -que es Dios-obrará en ti y cualquier tratamiento será válido para curar. Al quitar la causa primigenia -que es el no estar integrado al resto del Universo- desaparecerá el síntoma o efecto del mal.
Es increíble la rapidez con que obra este cambio. De un momento a otro la persona siente que se renueva. Tumores malignos se desvanecen cuando el amor se extiende a las demás criaturas (que aparentemente no tienen que ver nada con nosotros). Huesos porosos se llenan de calcio, vista borrosa se aclara; parece un milagro, pero no lo es. Se trata de la ley de la compensación de actos que obra automáticamente (karma), despejando el camino que tenía bloqueado.
”A Dios rogando y con el mazo dando”. Aquí se interpreta como cuando una persona ruega a Dios para que le quite los males, al mismo tiempo que ella está asesinando animales y árboles que son también criaturas (y parte) del mismo Dios aI que ruegan.
¿CÓMO AUMENTAR EL AMOR?
Muy fácil: basta un cambio mental y unas cuantas acciones física: el amor que sientes por tus hijos, padres o hermanos extiéndelo a todos los seres que pueblan la tierra; míralos como si fuesen también tus hermanos.
Realmente es muy fácil amar a los propios: el buitre, cuando llama a sus pichones, les dice: “Vengan conmigo, capullitos de amor”. Sin embargo son terribles depredadores que involucionaron hasta comer sangre y carroña y, para eso, tienen que destruir vidas de inocentes cabritos y demás seres.
No confundir el amor instintivo que se tiene por los hijos con el delirio de posesión, pues éste trae los peores sufrimientos. ”Sufre por sus hijos el que tiene hijos, sufre por sus posesiones el que tiene muchas, y sufre por sus amores el que tiene apegos. Sólo cuando la compasión se extienda hacia todas las criaturas, solamente así terminará el dolor.” -Buda
No sólo sientas amor por tu mascota, perro o gato; piensa también en el toro, la vaca, el cordero y el pollito que son torturados diariamente para convertirlos en carne putrefacta, que arruina el alma y el cuerpo; y, además, encadena al espíritu a una rueda dentada la cual, al invertir sus eslabones, tritura despiadadamente a quienes se engancharon a la cadena alimenticia de matar y ser matado. Es posible salirse de ahí, ahora que tenemos los medios.
Muchas personas asisten al horroroso espectáculo de ver matar un torito y aplauden gozosas cuando éste muere bañado en sangre, después de haber sido humillado ante miles de morbosos espectadores. Estas personas creen que Dios es un suave colchón de espuma, donde se acuestan a reposar tranquilos. “Se apoyan en la misericordia divina, pero ellos carecen de misericordia.”
Creen que la misa dominical es una esponja que absorbe todos los pecados de la semana. La mayoría, que vive pecando y confesándose, dice: “el que peca y reza empata”. Cuando despierten a la realidad de otra vida se encontrarán con las terribles ”Leyes ocultas de un universo desconocido”.
Mira cómo golpean y abusan del caballito cochero, que se debate entre automóviles y el duro pavimento. Atado a un pesado carro, con los ojos semivendados, con un hierro dentro de la boca que lo asfixia cuando el cochero hala bruscamente la soga para que frene.
El lomo con llagas producidas por los tablones con que lo enganchan al carruaje y, con el látigo como acelerador, así es el diario vivir de este animalito. Después de una vida de torturas lo llevan al matadero, le clavan un punzón de hierro en la frente y lo venden como carne en restaurantes. ¿Dejarías hacer con tu perro lo mismo? ¿Entregarías tu gato al carnicero? ¿Harías un asado con tu mascota?
¿Entonces, por qué un amor tan limitado a unos pocos seres, si sabiendo que el universo hierve en vidas?
El mundo está lleno de males y enfermedades, debido a que el amor de las personas no se extiende sino a unos cuantos metros a su alrededor. ? M.A.
En China comen perros, en Perú comen gatos, en Colombia comen hormigas y lagartijas; y todo esto ocurre porque según algunos médicos se puede comer de todo.
¿Harías un asado con tu mascota? El absurdo mito acerca de las proteínas ha llevado a la gente a ser cruel con los animales y alimentarse de cadáveres los cuales dañan su organismo.
¿Por qué por ejemplo el perrito no se puede comer y el cabrito sí, sabiendo que ambos inspiran el mismo amor y ambos aman la vida y temen la muerte igual que tú?
La respuesta a los anteriores interrogantes la puedes encontrar y comprender ampliamente en el libro Vida en 7 mundos.
LA AMORTERAPIA
(subpotencia del saber pensar)
¿Quieres sentir una sensación maravillosa, indescriptible con palabras; algo que armoniza tu cuerpo en forma instantánea y te hace disminuir en tres minutos tu enfermedad? Entonces, ve al campo, abraza un árbol, pon tu cara en su corteza poderosa, cierra los ojos y dile: Te quiero, te necesito, eres uno conmigo: de hoy en adelante haré lo posible por protegerte; gracias por tu sombra y por el oxígeno que me regalas diariamente. No te convertiré en cajas de cartón.
Si logras hacer lo anterior, con profundo amor y devoción, sin falta la Naturaleza producirá un milagro en ti; ella devuelve el mil por uno y no se hace esperar. Cúrate con el amor por la Naturaleza, la máxima terapia que existe: La Amorterapia:
Pero entendamos que amor es acción, no una simple palabra gastada por las personas que no lo tienen y la nombran para todo.
¿Por qué unas personas se curan fácilmente o no enferman y otras sufren?
Cuando nada da resultados es muy fácil saber la causa: hay saldo rojo en la cuenta cósmica (karma). Quizá la persona ha agotado sus buenas acciones y no hay a dónde pedir. Lo mejor es consignar en el banco del bien y del mal (karma). Para poder librarnos del mal es necesario consignar bienes.
Muchas personas dicen: “Yo me mantengo haciendo bien a mis hijos y cumplo con todas las obligaciones abnegadamente con los míos”. Allí es donde algo anda mal. Es fácil querer lo propio y afanarse por lo que uno cree que le pertenece; pero esto es ego.
El verdadero amor es el que se practica con criaturas que uno no conoce y de las cuales no se espera ninguna retribución; sólo eso es amor, y ese amor, el verdadero, es el único que cura; sobre todo cuando el banco de nuestros derechos y deberes, universales está bajo en fondos.
EL PODER CURATIVO DE HACER EL BIEN
Basta que una persona, que ha hecho todo por curarse y no ha obtenido resultados cuando otras sí, haga buenas obras. Cualquier cosa que pueda; basta muchas veces con hacer el bien luchar contra el mal, para que se realice un desbloqueo en su cuerpo; la armonía de la Naturaleza inunda su ser de amor universal y la persona simplemente sana al toque de cualquier terapia o acción.
Cuando veas que tratan mal a un animal, ¡protesta! Porque el espectador silencioso es tan cómplice como el ofensor. Muchos cruzan las manos sobre su pecho carente de amor y sólo piensan para sí: ¡Qué tristeza! Y siguen campantes su camino. Te invitamos a unirte a unas instituciones que actúan en defensa de los animales, de los árboles, de los ríos, del aire…
Necesitamos de tu amor y tú necesitas del amor universal, el de todos juntos, para poder sanar.
Armonízate con todo el Universo junto y recibe los beneficios de inmediato; no pidas con las manos vacías.
Ayuda a defender a otros que también forman parre de ti, y éstas son riquezas que ni la muerte puede arrebatarte. Una sola acción amorosa puede abrirte puertas que hasta ahora no habías siquiera imaginado que existían. Te encuentras cerca de tu recuperación total; si decides actuar desde este momento, te comenzarás a sentir mejor.
Ten presente que no existen enfermedades incurables. No obstante, cuando una enfermedad no quiere ceder y el dolor, el desánimo y la desesperación se hacen casi insoportables la única causa que queda pendiente es que la persona se encuentra con bajos fondos en el banco del karma (ley universal de compensación de actos) y está cobrando con su moneda habitual: el dolor
Mas, hay una excelente noticia: no sólo con dolor se pagan nuestros actos pasados. También se puede pagar con buenas obras.
Quita el dolor a los demás y se te quitará el tuyo -Ley infalible
MEDICAMENTOS INVISIBLES
La medicina produce únicamente medicamentos que se pueden comer, untar, inyectar, vender y cobrar. La Antemedicina posee medicamentos invisibles:
Un jardín lleno de margaritas, un amanecer salpicado de arreboles, el sonido de un arroyuelo cristalino, el esplendor de una flor, el dulce canto de un ruiseñor, la sinfonía del arcoíris, la danza alegre de una mariposa, el aliento perfumado de la pradera, la danza de las estrellas, la sonrisa franca de un niño y las palabras “te quiero mucho” son, entre muchos, potentes medicamentos invisibles que curan enfermedades incurables y dispones de ellos diariamente.
EPÍLOGO
Gracias por haber leído este libro. Sé que has sabido desechar aquello que no está de acuerdo con tus conceptos -cosa que respeto profundamente acogiste lo que fue importante para ti. Insisto sólo en que recuerdes 2 cosas:
Primero: ”La enfermedad nunca te derrotará siempre y cuando tu decisión por vencerla sea lo suficientemente poderosa”. Las peores enfermedades son el temor y el desaliento, y la mejor medicina es tener el valor de hacer un cambio.
Segundo: la Antemedicina asegura y demuestra que las mayorías sufren y mueren a causa de enfermedades que no tienen ni existen. Sólo son gritos de dolor del organismo suplicando que cesen las agresiones brutales que la persona le infringe por no saber vivir, comer ni pensar.
Esto se corrige fácilmente obteniendo las 12 potencias. La enfermedad, ese fantasma inexistente, ese llanto angustioso del organismo, desaparece cuando nuestro cuerpo es tratado con cariño.
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